Tiempo propicio

 


El tiempo es tan inmenso

Que no existe.

Lo hemos inventado para ponernos metas

Y medir nuestras ilusiones,

Nuestras nostalgias y fracasos,

Los logros conseguidos y los sueños sidos,

Los días que faltan para besarte,

Los días pasados desde aquel beso.


Ahora que el año acaba

Nos hacemos propósitos,

Nos inventamos planes

Para llenar el tiempo por venir.

Nos tranquiliza pensar que tenemos

365 días por delante

Y uno más si es bisiesto

Para cumplir nuestros proyectos.

Ya lamentaremos a fin de año

No haberlos alcanzado

O celebraremos haberlos conseguido.


Ese tiempo lineal en el reloj

Es sentimental en nuestro corazón.

Mi distancia con el pasado

(y con el futuro)

No se mide en segundos, minutos, horas, días, años, lustros, décadas.

Se mide en ilusiones, entusiasmos, alegrías.

Se mide en el recuerdo de las caricias,

En el cariño de las palabras,

En la pasión de la amistad y del amor.


Tiempo, tiempo

Que llegas a destiempo

Y te vas sin dar explicaciones,

Que corres deprisa

O no acabas de pasar.

Tiempo que hacemos

Cuando no tenemos nada que hacer.

Tiempo que deshacemos

Cuando la vida nos atropella.


Oh, tiempo!

Que creemos ilimitado en nuestra infancia

Y lamentamos su raudo discurrir en la vejez.


Que el 2026 os traiga un tiempo propicio

Que mañana recodéis cercano.


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Mi amiga Xiaoming Yang lo ha traducido al chino. ¡Gracias! 🍾🥂





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