Ayer nos acercamos en familia a conocer la nueva librería La Mistral, que aún no habíamos visitado, entre Arenal y Mayor, y luego pasamos por La Central en Callao. Paseo por Gran Vía y la remodelada Plaza de España, reverencia íntima a Cervantes, volvimos a Palacio sin pretensiones regias, y tapeamos castizamente por Ramales y Ópera. Siempre acuden recuerdos de la infancia en mis paseos por el centro, memoria de un Madrid que se pierde y se rehace a su modo. Luego, en casa, salieron estos versos. I Hoy es el primer año Que no está. Y así en todo. II Aunque las estupendas señoritas del tiempo Lo anunciaban desde hacía días, Con sus palabras y mapas, No con sus ropas, Siempre llega sin aviso. De pronto un día te levantas Y está ahí: El frío. En Madrid se dice: 9 meses de invierno Y 3 de infierno. Hay que despedirse De la camisa de manga corta Y del shorcito, Que dice un amigo cubano. Rescatar el plumas y la bufanda. Recuperar las botas Y el calcetín grueso. Pero no me negarán Que da regu...